miércoles, 29 de octubre de 2008

Run Away

"Escapar"

El reloj-despertador sonó a las 6:30, como todos los lunes. Se despertó, desperezándose de su incomodo sueño de una plaza, y se dirigió al baño para darse una horrible ducha fría. Y pensaba en escapar.

Agarró de un manotazo las cuentas a pagar retrasadas, mientras apura a los chicos a subirse al auto. El transito es pesado y avanza a paso de hombre, como todos los lunes. Los chicos van a llegar tarde al colegio. Él va a llegar tarde al trabajo. Y pensaba en escapar.

Su jefe lo retó, como todos los lunes. La hora pico ya no es excusa. Estresado, los nudos en su espalda enredan el ya complicado trazo de su mente. Las carpetas se apilan en su escritorio. Y pensaba en escapar.

Descanso para almorzar de 30 minutos, 20 de los cuales se pierden irrefrenablemente por la preparación de los alimentos. Todos los lunes extraña las comidas que le preparaba su esposa. Masticó rápidamente los desechos reciclados, combustible de su desgano. Y pensaba en escapar.

"Los aumentos son para empleados sobresalientes" dijo el jefe. Él no pretendía un aumento, solo inquirió sobre su sueldo, dos meses retrasado. No sobran las horas, pero nuevamente va a tener que dedicar algunas de más en su trabajo, como todos los lunes. Y pensaba en escapar.

Su esposa secaba sus lágrimas con un pañuelo cuando él arribó tarde a su hogar. Las cuentas impagas, los chicos que repiten años, la falta de comida. Ella lo miró, añorando tiempos pasados, donde el verde era solo el color de su vestido, y no el tono que ahogaba sus vidas. Y pensaba en escapar.

Se sentó a la computadora y abrió la aplicación. Su personaje, su avatar en la virtualidad, se hallaba atado a un poste, rodeado de enemigos. El malvado villano reía oscuramente, mientras se disponía a acabar con el mundo. Él seleccionó el comando "Escapar".

Y finalmente escapó.

1 comentario:

SergioMC dijo...

Lo disfruté. Debo decirlo. Esa mezcla de la tecnología de la vida diaria con las sensaciones más primitivas de la humanidad siempre me han agradado (aunque no he leído de muchas). La repetición de la frase, un hit.