Then

Ya no uso algunas frases
de las que solian llenar el aire
ya no uso palabras grandes
dentro de las cuales hay un refugio
ya no llegan esos caminos de sombra
que alivian el ardor
ya no se distingue el horror delante
a través del llano horizonte
ya no calma con la fuerza del torrente
una efigie de piedra con mil dedos marcados
ya no se escapan miradas como ramas
ni placas sobre melenas de león
ya no se juntan los cristales en la orilla
conmoviendo espejos ajenos
ya no vienen la muerte y la sangre
el cobre y la roca
ya no regalo perlas ni ojos
caidos como arena de la luna.

Ahora
llegan palabras quedas
susurros de telas apagadas
la quietud de una imagen
vista cien veces
estudiada cien veces más
la figura de un brote
estirando los brazos bajo una sombra
que no se alcanza a distinguir
retoños de algodón
con pisar de nieve
la maqueta de una plaza
dentro de una plaza
escondida en la grieta
entre dos ladrillos de terracota
roja la arcilla entre los dedos
húmeda la tierra en los pies
el frio que trepa por la piel duele
pero su escarcha cierra
otro viento se avecina.

Bug

Un insecto
habita debajo de la nuca
no todos lo tienen
pero es facil notar
las lineas azules que deja
al alimentarse

corre entre las lineas nerviosas
comiendo los pulsos eléctricos
que van del corazón al cerebro

hay peligro de paro
siempre que haya más de dos
ya que juntos
envuelven los sentidos con sus crias
que tapan los ojos con sus patas
los oidos con el raspar de antenas
el olfato con el perfume viejo
las manos con su crepitar
saliendo de la boca como un torrente
invisible y sólido
que no deja salir nada más

camina con el mismo ritmo
que el pulso del huesped
así que muchos
lo consideran amigo
lo alimentan bien
se preocupan por su sueño
y hasta le dedican
horas y horas de pensamiento
mi pequeña mascota
dicen
alimentate bien
no tomes frio
escondete bajo mis pupilas azules
para que no te pege el sol
dejame besar
tu coraza de alfileres

cuando todo esta oscuro
y lo unico que se escucha
es el murmullo de los recuerdos
algunos, osados
levantan al insecto entre sus manos
lo enredan con los brazos
calentando el poco amor que les queda
si la tierra no nos quiere
bichito mio
tendremos que usar nuestros pies.

Hammer

Valdrá la pena
la mirada de las estatuas?
Esos bustos de piedra seca
que acarician la palma
al acercarla
abrigandola con ese frio
estático
impermeable

Valdrá la pena
el cariñó aspero de la arena?
El oscuro placer
de las cosquillas entre los dedos
metiendose en los pliegues
que nadie más conoce
dejando pequeñas, invisibles
lineas rojas sobre la piel
que arden con el alcohol

Qué es lo que decide al fin
cuando el calor obliga a la mano
al brazo que todo levanta
a empuñar el martillo
que muele, golpea
destruye, pulveriza
las pacientes efigies
tan solo para saborear
el sonido de la arena
entre los dedos